EL IDEAL DEL HOMBRE MODERNO

on 17 Noviembre 2017
Visto: 3599

En el mundo occidental algo antes y en este país a partir de los años 70-80 entramos en una revisión del machismo y de los roles sexistas tradicionales, un movimiento sano de “justicia social y humana” de liberalización de la mujer y un quitarnos el machismo de encima. Y nuestra visión es que vamos trascendiendo el sexismo y el machismo del sistema patriarcal impositivo y opresor, y eso está muy bien, pero a la vez vemos que tanto hombres como mujeres estamos en una complicada situación “post liberalización de la mujer”: los modelos de nuestros padres no nos sirven y los nuevos modelos nos resultan a veces muy exigentes (para la mujer incluso más que para el hombre) y nos sentimos desubicados y presionados por las exigencias del nuevo modelo. 

Entonces lo que tenemos es una amalgama de hombres y mujeres con distintas auto-exigencias o exigencias externas provenientes de diferentes combinaciones de estos roles tradicionales y modernos, es decir, mujeres y hombres súper liberad@s  y modern@s y otr@s tradicionales y todos los grados y matices que hay entremedio.
¿Y los de un extremo son más felices o más libres que los otros o que los que están en los muchos estadios intermedios? Pues no tanto realmente. La evolución al nuevo modelo es sin duda lo mejor, pero eso no hace que la vida de la mujer y hombre moderno occidental sea una maravilla: las exigencias de la vida capitalista-consumista-productiva moderna hace que vivamos a toda pastilla y persiguiendo cosas externas e idealizaciones que nos encadenan

Vamos…que encadenados estamos todos al final y para desencadenarnos en este grupo de hombres y en cualquier trabajo de desarrollo personal es fundamental no quedarnos enmarañados con una de las partes o en la superficialidad. Por eso no es el trabajo central de nuestro grupo de hombres trabajar continuamente desde las masculinidades o con el sexismo: el ser hombre es una parte del ser humano que hay debajo, que se compone del ego (cuerpo físico, mental y emocional,  o simplifiquemos como personalidad) y de nuestra Esencia espiritual

Bueno… pues vayamos al fondo psicológico y existencial del asunto... qué nos encadena? Y qué podemos hacer?. En ello estamos...

Alfonso Labeaga, "Fontxo"